Foto para: La poda 12/06/2025

La poda

Decisión que define el futuro del viñedo

En cada rama que se corta, en cada decisión de poda, se esconde mucho más que una técnica agrícola: se define el destino del viñedo. La poda es el lenguaje que el viticultor utiliza para dialogar con la planta, guiándola hacia una producción equilibrada, saludable y de calidad. En ese gesto silencioso y ancestral, el ser humano modela no solo una cepa, sino también el carácter del vino que nacerá de ella.

La poda en vid cumple múltiples funciones esenciales:

*   Regulación de la carga frutal: determina cuántos brotes se dejarán, influyendo directamente en la producción del ciclo siguiente.

*   Equilibrio vegetativo-reproductivo: favorece el balance entre la producción de hojas y frutos, clave para la maduración.

*   Sanidad y longevidad del viñedo: elimina madera vieja, partes dañadas y favorece la aireación de la planta.

*   Manejo de la estructura: permite conducir la vid según el sistema elegido (espaldera, parral, cordón, etc.).

Cada tipo de poda (invernal, verde, de formación o de producción) aporta beneficios específicos en función de la etapa del cultivo y el objetivo del productor.

El peso de la poda y su relación  con la nutrición del suelo

El peso de poda se refiere a la cantidad de material vegetal leñoso eliminado durante la poda de invierno en las vides, expresado en kg/planta o kg/ha. Esta medición es un indicador clave del vigor de la planta, directamente relacionado con su estado nutricional, manejo agronómico y productividad.

  1. Importancia en el manejo del viñedo al obtener estos datos:
  • Ayuda a ajustar la carga de yemas en la poda (relación yema/peso de poda).
  • Permite planificar programas de fertilización basados en datos concretos.
  • Mejora la eficiencia en el uso de agua y nutrientes.
  • Contribuye a lograr un equilibrio entre crecimiento vegetativo y reproductivo, fundamental para la calidad de la uva.
  1. ¿Cómo se determina el peso de poda? Procedimiento:

  • Seleccionar plantas representativas del viñedo (generalmente 5 a 10 por bloque).
  • Realizar la poda invernal de forma habitual.
  • Recolectar y pesar el material leñoso (ramas del año anterior, sin hojas ni racimos).
  • Expresar el resultado en kilogramos por planta o kg/ha (según la densidad de plantación).

Un peso de poda muy bajo (<0,3 kg/planta) puede indicar estrés hídrico, problemas sanitarios o deficiencias nutricionales, mientras que un exceso (>1,0 kg/planta) puede señalar un desequilibrio entre las raíces y la parte aérea, que afectará negativamente la calidad del fruto. Valores intermedios y equilibrados (0,4 a 0,8 kg/planta) suelen ser óptimos para una buena producción y calidad de uva.

Por eso, pesar la poda no es una rutina, es una lectura precisa que nos permite tomar decisiones correctivas en la fertilización, densidad de plantación, riego y manejo del canopeo.

  1. El papel de la nutrición del suelo en la poda (lo que está en amarillo lo sacaría)

La poda y el peso de poda tienen una relación directa con la nutrición del viñedo. Para que la vid pueda alcanzar el equilibrio vegetativo-reproductivo óptimo, es esencial que el suelo brinde los nutrientes adecuados, favoreciendo la sanidad y longevidad de la planta. 

Los suelos de la región Cuyo, caracterizados por la baja cantidad de materia orgánica, alta mineralización y condiciones áridas, requieren un manejo estratégico para garantizar la productividad y calidad del viñedo. Por este motivo es clave mejorar la estructura y fertilidad del suelo, permitiendo un mejor aprovechamiento del agua y los nutrientes. 

SIMBIOS promueve un manejo inteligente del microbioma del suelo que permite un uso más eficiente del agua y los nutrientes, alineándose con la importancia de ajustar la fertilización según el vigor de la planta. 

Productos como Blocompost, Trichovidas y Zurich optimizan la absorción de nutrientes, favoreciendo un crecimiento balanceado de la vid: 

*   Blocompost: aporta microoganismos benéficos y materia orgánica de calidad, enriqueciendo el suelo y mejorando su estructura. 

*   Trichovidas: ayuda a los microorganismos benéficos de la rizófera a cumplir mejor sus funciones, y la planta aprovecha mejor los nutrientes.

*   Zurich: polifenoles de aplicación al suelo, son clave para activar la microbiota del suelo y fortalecer el cultivo, evitando excesos o deficiencias nutricionales que afecten la producción y calidad del fruto. 

El peso de poda no solo refleja el vigor de la vid, sino también el estado del suelo y la salud metabólica de la planta. Suelos vivos, ricos en microorganismos beneficiosos, permiten una mayor absorción de nutrientes y un desarrollo vegetativo equilibrado. Esto se traduce en una masa podada coherente y controlada.

Por otro lado, los polifenoles presentes en la madera podada son indicadores de defensa natural de la planta. Su concentración puede reflejar cómo respondió la vid al estrés ambiental, a la nutrición y al manejo agronómico.

Así, el peso de la poda no es solo una medida física, sino una lectura del sistema: suelo, planta y manejo

  1. La poda y la nutrición del suelo son una inversión

Desde un punto de vista comercial, la poda debe entenderse como una inversión estratégica en calidad. Una vid bien podada y con un buen plan de nutrición produce uvas más homogéneas, mejor expuestas, con mayor potencial enológica, lo que se traduce en:

  • *   Mayor valor comercial del producto
  • *   Mejora en los índices de calidad (Brix, acidez, polifenoles).
  • *   Optimización de costos en manejo y cosecha,
  • *   Fidelización del mercado a través de vinos consistentes y expresivos.
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La determinación del peso de poda es una herramienta sencilla, económica y eficaz para evaluar el vigor de la vid y su estado nutricional. Incorporarla como práctica rutinaria en el monitoreo del viñedo permite mejorar el manejo agronómico, optimizar recursos y asegurar una producción de uvas equilibrada y de calidad. Conociendo estos datos podemos elaborar el plan de nutrición adecuado para el cultivo.

El verdadero equilibrio de la vid comienza en el suelo y SIMBIOS, como pionero en el cuidado del suelo pone a disposición de los productores todo su conocimiento y desarrollo para lograr suelos nutridos y productos de calidad.

La poda no es solo una técnica, es una inversión consciente en la calidad y el futuro del viñedo. Es el momento donde el saber y la sensibilidad del viticultor se unen para equilibrar la planta y potenciar su fruto. Una vid bien podada produce uvas de alto valor y vinos más expresivos. El peso de la poda no solo se mide en kilos, sino en compromiso con la tierra, el vino y la historia que se quiere contar.

Nota: gentileza de Simbios

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